El 28 de octubre de 2022, dos meses y medio después de que Gustavo Petro se posesionara como presidente de la República, Juan Gonzalo Marín, activista y opositor a proyectos mineros como Quebradona, firmaba el primero de los 3 contratos que ha celebrado con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.
El primer contrato tuvo un valor de $10.710.000 y finalizó en diciembre de 2022. Tenía como objeto “Ejecutar acciones de identificación, caracterización, sistematización y análisis de espacios de participación y de educación ambiental que tengan como propósito fortalecer la gestión ambiental del territorio”. Dentro las obligaciones que tenía Marín se encontraba el “Análisis y sistematización de los conflictos socioambientales en territorio” (ver).
El segundo contrato inició en marzo de 2023 y finalizó en diciembre de ese año. El monto contratado fue de $48.450.000 con el objetivo de “apoyar la caracterización de conflictos socio ambientales (…) habilitando espacios de Diálogo Social haciendo uso de la estrategias y herramientas pedagógicas diseñadas en el territorio que le sea asignado”. Las obligaciones del contratista en este segundo contrato se centraron en buscar argumentos para justificar conflictos socioambientales: “Brindar insumos técnicos que permitan crear, estructurar e implementar el sistema de información de conflictividad socioambiental de conformidad a las directrices dadas por la Subdirección de Educación y Participación” (ver).
El tercer contrato se celebró en abril de este año y está vigente hasta el 30 de diciembre de 2024 con el objeto de “Prestar servicios profesionales a la Subdirección de Educación y Participación para apoyar el desarrollo de acciones territoriales relacionadas con los procesos de diálogo social” por un monto de $47.483.333 (ver).
Por estos tres contratos, Marín está recibiendo la suma de $106.643.333, que en la práctica son para generar acciones en contra del proyecto Quebradona configurándose un claro conflicto de interés. La licencia ambiental de este proyecto depende de la ANLA, entidad adscrita a este ministerio. Ni la empresa que opera el proyecto minero ni las comunidades que están a favor cuentan con garantías para que sus argumentos sean tenidos en cuenta en el desarrollo de esta iniciativa.
Juan Gonzalo Marín es uno de los 17 enlaces territoriales que tiene contratados el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible para los objetos anteriormente descritos y están distribuidos por ecorregiones: Amazonía; Bahía Cartagena; Catatumbo; Ciénaga Grande de Santa Marta – Sierra Nevada; Ciénaga de Zapatoca, Serranía del Perijá, corredor de vía de Cesar; Insular; Macizo Colombiano; Mojana; Altillanura y sabanas de la Orinoquía; Pacífico; Páramos; Sabana de Bogotá; Valle de Aburrá; Eje Cafetero; Guajira; Sur Oriente Antioqueño (SIC) (Es suroeste antioqueño). (ver estudio que justifica la contratación de estos 17 enlaces territoriales).
Así las cosas, es difícil que nuevos proyectos mineros, de gas y petróleo puedan salir adelante bajo el mandato del presidente Petro.
Marín se radicó en Jericó, Suroeste de Antioquia, hace aproximadamente 5 años junto con su esposa Lina Velásquez quien también es una activista en contra del proyecto Quebradona como se puede ver en su cuenta de X.
Desde que llegó al municipio, Marín ha hecho oposición al proyecto minero como se evidencia en los artículos que ha publicado en el periódico Despierta Jericó, medio que nació para hacer campaña en contra de Quebradona, y donde Juan Gonzalo es miembro del comité editorial; también participa activamente de organizaciones e iniciativas en contra de este proyecto como el Cinturón Occidental Ambiental - COA y el documental Verde como el Oro.
Organizaciones y movimientos sociales que están a favor del proyecto Quebradona como Jericoanos con Visión y Avanzar dicen que Marín nunca los ha abordado para entablar un diálogo social y escuchar sus argumentos de porqué están de acuerdo con este proyecto minero. Sólo tiene contacto con personas contradictoras a Quebradona. Mismo comportamiento que ha ejercido la ministra de Ambiente Susana Muhamad, quien en X interactúa con “Retuit” y “Me Gusta” a los mensajes que le envía la esposa de Marín, Lina Velásquez, pero no hace lo mismo con la comunidad que apoya este proyecto minero y que constantemente le pide a la ministra que los escuche.
El gobierno del presidente Gustavo Petro sigue empecinado en dialogar sólo con quienes coinciden con sus posturas, ignorando a quienes los contradicen, cuestionan o expresan puntos de vista distintos; tampoco le importa contratar a funcionarios que tienen conflictos de intereses como los de Juan Gonzalo Marín en Jericó porque son útiles al propósito del gobierno de frenar los proyectos mineros para la transición energética que absurdamente el mismo gobierno dice promover.
Queda en evidencia que son falsos ambientalistas que sólo están por su propio bienestar personas que ni siquiera son de la región y lo peor es que se aprovechan de personas del común y los ponen a pelear entre ellos para recibir sus beneficios